Bienvenido a Collioure, una joya de la Costa Bermeja, donde el mar Mediterráneo se encuentra con las primeras colinas pirenaicas. Enclavada en las colinas, a pocos pasos del pintoresco puerto y sus coloridas callejuelas, esta casa rural para dos personas promete una estancia auténtica en los Pirineos Orientales.
Ubicada en la planta baja de la casa del propietario, en una tranquila y frondosa residencia, ofrece un ambiente tranquilo y relajante. Los huéspedes tienen acceso a la piscina compartida de la residencia para disfrutar de los días soleados de la región.
Collioure es un destino ideal para combinar turismo, naturaleza y cultura. Pasee por el puerto, descubra el Castillo Real, la iglesia de Notre-Dame-des-Anges o las galerías de arte que perpetúan el espíritu de los pintores fauvistas. Los amantes del senderismo apreciarán los senderos costeros y el macizo de las Albères, que ofrecen espectaculares panorámicas del Mediterráneo. Los amantes de la gastronomía podrán degustar especialidades locales (anchoas, vinos de Banyuls y Collioure) y explorar los viñedos que bordean las laderas circundantes. En las cercanías, déjese cautivar por los pueblos típicos de la región, las calas salvajes de la Costa Bermeja y los eventos culturales y festivos que marcan la vida local.

Varias escaleras exteriores dan acceso a: un agradable salón con cocina americana que da a un balcón con vistas al mar.
Un dormitorio: 1 cama doble (140 x 190 cm) que da a una terraza/patio.
Baño con WC.
Jardín con varias terrazas equipadas con muebles de salón y barbacoa. Fácil aparcamiento en la calle: residencia privada bajo barrera, una plaza dedicada a la casa rural.