La villa rural " Son Rossinyol" es un oasis de tranquilidad y el lugar de vacaciones para una pareja enamorada o una pequeña familia.


En el exterior, el jardín diseñado con mucho cariño, que muestra un gran sentido del detalle, le espera en la casa. Una terraza cubierta junto a la casa alberga una agradable zona de descanso con una mesa y cómodas sillas de jardín y una zona de comedor, para disfrutar agradables barbacoas al aire libre.


La gran terraza invita a tomar el sol en las agradables tumbonas para después refrescarse en la piscina privada de 7m x 3m.


La terraza cubierta conduce al interior de la villa, acogedora, rústica y decorada con gusto. El salón y el comedor son de planta abierta y cuentan con una mesa de comedor con espacio suficiente para todos los visitantes, con dos bonitos sofás, un rincón de televisión, y una chimenea para calentarse en los fríos días de invierno.

La cocina está totalmente equipada e integrada en el espacio. Las paredes y baldosas combinan con los colores cálidos de los muebles de madera y las vigas del techo, confiriendo a toda la estancia un ambiente acogedor.


Un pequeño pasillo conduce a los dos dormitorios y al baño. En el primer dormitorio hay una cama grande de matrimonio que ofrece un sueño reparador, mientras que el segundo cuenta con una litera para tres personas, cama doble en la parte inferior y una individual en la parte superior.


Las habitaciones están decoradas con detalles encantadores y cuentan con un gran armario y una cómoda con mucho espacio. El luminoso cuarto de baño, con su ducha a ras de suelo, es moderno y funcional.


La finca está situada entre Llubí y Sineu. Llubí es un pequeño y tranquilo pueblo, conocido por sus sabrosas alcaparras, cultivadas en los campos de los alrededores, con pequeños supermercados, restaurantes y bares.


Sineu es un encantador y auténtico pueblo mallorquín, con pequeños supermercados, restaurantes y bares y conocido por su famoso mercado agrícola, que acontece cada miércoles y donde podrán comprar productos frescos y degustar la sabrosa cocina mallorquina.


Inca se encuentra a 15 minutos en coche, conocida como la ciudad del calzado y la piel. Las famosas playas de Playas de Muro y Can Picafort se encuentran a tan sólo 20 minutos en coche, donde disfrutarán el placer de bañarse en el mar Mediterráneo en las kilométricas playas de arena.


La villa "Son Rossinyol" es tanto un oasis de tranquilidad y un refugio perfecto como un buen punto de partida para las exploraciones de la isla.


- Este alquiler no acepta los grupos de jóvenes menores de 28 años.


- Tasa turística no incluida.

De mayo a octubre, tiene un coste de 2.2 Euro por persona, a partir de 16 años y por noche.

De noviembre a abril, tiene un coste de 0.55 Euro por persona, a partir de 16 años y por noche.