Déjate sorprender por esta preciosa casa en la zona de St. Feliu de Guíxols, pueblo con un ambiente familiar en la Costa Brava. La casa tiene una cocina totalmente equipada que accede al gran salón que es un espacio muy amplio y cómodo para descansar o jugar. Desde el salón, hay acceso directo a una preciosa terraza con vistas a mar en donde podrás disfrutar de tus comidas en verano, tomar el sol o relajarte en el sillón colgante mientras alguien prepara una barbacoa. Esta terraza tiene acceso al jardín y a su piscina comunitaria para darte un baño y amortiguar el calor en épocas de verano. En esta planta hay también un aseo.

En el primer piso se encuentran 2 habitaciones, una de ellas con cama doble con una bonita vista al mar y un baño con ducha. También hay otra habitación con la cama más pequeña pero también doble y con vistas a mar. En el segundo piso hay una habitación con una cama doble y una de individual y otra habitación con una litera con dos camas individuales. Ambas habitaciones tienen un baño con bañera para compartir. Arriba de todo hay una terraza con bonitas vistas al mar y al pueblo, en donde podrás relajarte por la noche antes de irte a dormir. A parte de la decoración cuidada y de las vistas al mar, se agradece también que la propiedad disponga de un parking privado para dos plazas de coche.

La casa está situada en una zona tranquila, pero a la vez próxima a Sant Feliu de Guíxols y a s’Agaró. A pocos minutos andando podrás acceder a la Punta del Molar, un paisaje increíble que los amantes de la fotografía no pueden perderse, con bonitos rincones y miradores y que podrás recorrer a través del camino de ronda que sale desde la Badía de Sant Pol y que finaliza en el puerto de Sant Feliu pasando por encima de la Vía ferrata de la cala del Molí. Desde aquí, también se llega a Cala de l’Ametller, para aquellos que buscan estar lejos de las multitudes, eso sí, es imprescindible ir con zapatos cómodos por ser una cala de piedras.

Para llegar al centro de Sant Feliu o s’Agaró, se puede llegar andando en unos 10-15 minutos, aunque a la vuelta es todo subida. En coche se tardaría unos 2-3 minutos. Hay también la posibilidad en julio y agosto de tomar el trenecito turístico que pasa muy cerca de casa y que hace una ruta desde la Badía de St. Pol hasta St. Elm pasando por el centro de Sant Feliu. El trenecito pasa aproximadamente cada hora y media.