Amplio y luminoso piso en Santa Margherita Ligure, situado en la primera zona de colinas, a 10 minutos a pie del centro y del mar. Se encuentra en una zona residencial tranquila, rodeada de naturaleza y con espléndidas vistas al mar. Se accede a través de una escalera de unos 30 escalones y se abre directamente a la sala de estar con cocina americana seguida de un pequeño lavadero, dormitorio doble con cuarto de baño con ducha, pequeño dormitorio con dos camas individuales y segundo cuarto de baño.

Para completar el piso hay una espléndida terraza panorámica con vistas al mar para el uso de nuestros huéspedes y un jardín privado con árboles frutales.

Enfrente del edificio hay una cómoda parada de autobús, mientras que debajo de la casa nuestros huéspedes pueden hacer uso de un garaje para su uso exclusivo.

También ofrecemos a nuestros huéspedes experiencias auténticas para vivir en contacto con los lugareños. Si está interesado, póngase en contacto con nosotros y estaremos encantados de ayudarle a crear sus vacaciones perfectas descubriendo las bellezas de Italia.


Santa Margherita Ligure está situada en la Riviera Ligure di Levante, en una cuenca cerrada en la parte noroeste del promontorio de Portofino, y en la parte más interna del Golfo de Tigullio. La ciudad, situada al este de Génova, está rodeada de colinas cubiertas de vegetación mediterránea que dominan la llamada "Costa de los Delfines", que une la ciudad con Portofino. La ciudad es un popular centro turístico y balneario en la Riviera di Levante.

Parte del territorio municipal de Santa Margherita Ligure está incluido en el Parque Natural Regional de Portofino.

A poco más de 30 km se encuentra Génova, la ciudad portuaria y capital de Liguria, históricamente conocida por su importante papel en el comercio marítimo durante muchos siglos.

Conocido como uno de los mayores centros medievales de Europa, el centro histórico de Génova es un laberinto de callejuelas (caruggi) que se abren inesperadamente en pequeñas plazas, a menudo vinculadas, como las iglesias que allí se encuentran, a importantes familias nobles.

El espíritu de Génova reside en sus callejuelas, donde se mezclan diferentes olores, sabores, idiomas y culturas.

En el centro histórico se alza la catedral románica de San Lorenzo, con su fachada a rayas blancas y negras y su interior decorado con frescos. Calles estrechas conducen a plazas monumentales como la Piazza de Ferrari, con su característica fuente de bronce, y el teatro de la ópera Carlo Felice.

Imperdible e icónico es el Acuario de Génova, el más grande de Europa. Muestra más de 70 salas y unos 12.000 ejemplares de 600 especies de todos los mares del mundo. Una experiencia inolvidable para grandes y pequeños, que le llenará el corazón de emoción y de un profundo respeto por el mar y sus extraordinarios habitantes.

Imposible dejar de lado la tradición culinaria genovesa, con el legendario pesto de albahaca, famoso en todo el mundo, y la focaccia, que puede ser salada como la focaccia con aceitunas, cebolla y tomate, o incluso dulce y rellena.