Disfrute de la tranquilidad de esta hermosa casa de vacaciones con piscina privada climatizada en las afueras de Prades-sur-Vernazobre, en el Languedoc, a media hora de Béziers y de las playas de arena, en cualquier estación del año. Deguste una copa de buen vino de St. Chinian (a 5 km) en la terraza cubierta con magníficas vistas, diviértase en la encantadora piscina climatizada, disfrute del frescor de las habitaciones con aire acondicionado o navegue por la Wi-Fi gratuita en el encantador salón y en los días más frescos junto a la estufa de leña.
La orientación de la casa le protege del viento. Pase agradables veladas de barbacoa al atardecer. Una pequeña escalera conduce a la zona de la piscina por si quieres darte un chapuzón a medianoche. También se ha pensado en nuestros pequeños, ya que esta hermosa villa cuenta con el equipamiento necesario para bebés (cama, silla, parque infantil y cochecito). Con su extenso terreno privado y su amplia zona de aparcamiento, esta propiedad vacacional es un punto de partida ideal para sus excursiones por los alrededores. En el magnífico paisaje de esta región se pueden hacer excursiones a pie o en coche. Por qué no tomar un desvío hacia el Canal du Midi, muy cerca.
La bonita Roquebrun, a orillas del Orb (11 km), a la entrada del Parque Natural del Languedoc, con sus naranjos y granados y sus numerosos pinos, es una magnífica zona de recreo donde podrá practicar kayak o piragüismo o simplemente dar hermosos paseos por la orilla del río.
En los alrededores le esperan otras ciudades con encanto, ya que el departamento de Hérault, a orillas del Mediterráneo, está repleto de pequeñas joyas y ciudades cargadas de historia que bien merecen una visita: Pézenas, Agde y Sète. Por supuesto, la encantadora Béziers no puede faltar en su lista. Descubra lugares históricos como el "Plateau des Poètes", un jardín de finales del siglo XIX. un oasis verde que une la avenida Paul Riquet y la estación de ferrocarril.